El conjunto de Bérgamo se fue al descanso con un 0-1 adverso por un gol del bosnio Edin Dzeko, pero remontó en la reanudación con tantos del argentino José Palomino y del croata Mario Pasalic, y llegará con máximo entusiasmo a la cita europea del miércoles en el estadio San Siro milanés.
Con la mejor delantera de la Serie A (63 goles), el Atalanta agudizó la crisis de Roma, que lleva tres derrotas consecutivas y que sigue sin ver luz en este 2020.
El técnico Giampiero Gasperini reconoció en la víspera que su equipo ya piensa en la cita europea con el Valencia, pero destacó que el duelo ante el Roma era de igual importancia y alineó este sábado a su once de gala, liderado en la delantera por el esloveno Josip Ilicic, el argentino Alejandro Gómez y el colombiano Duván Zapata.
Sus jugadores no ahorraron energías en ningún momento. Presionaron con intensidad y atacaron con agresividad ante un Roma que, obligado a reaccionar tras dos derrotas consecutivas, también compitió con esfuerzo y ritmos altos.
Fue el Atalanta quien creó las primeras oportunidades concretas, con Gómez que se topó con el meta español Pau López en el minuto 10 y el defensa brasileño Rafael Toloi, que se acercó a la ventaja con una chilena acrobática que acabó fuera por poco.
Sin embargo, un error defensivo de Palomino justo al borde del descanso complicó el partido de los hombres de Gasperini. Dzeko recuperó el balón, se presentó ante el portero Pierluigi Gollini y le fulminó con un derechazo para enviar al Roma a los vestuarios con una valiosa ventaja de 1-0.
Podía ser un golpe psicológico para el Atalanta, pero el equipo de Bérgamo demostró carácter y reaccionó con contundencia nada más empezar la segunda parte. En una acción a balón parado, el propio Palomino se reivindicó al empujar al fondo de las mallas un balón prolongado por el albanés Berat Djimsiti (m.50, 1-1).
Con el apoyo del "Muro" del Gewiss Stadium, apodado de esta forma por haber sido edificado inspirándose en el célebre fondo del Westfalenstadion del Borussia Dortmund, el Atalanta siguió apretando y dio la vuelta al marcador en el 59 gracias a Pasalic, quien acababa de saltar al campo en sustitución de Duván.
Se le iba acabando la gasolina al Roma ante la intensidad del Atalanta y el entrenador portugués Paulo Fonseca intentó cambiar la dinámica al dar paso a los españoles Carles Pérez y Gonzalo Villar y al francés Jordan Veretout. Pero los romanistas se toparon con un Atalanta en gran forma atlética, que cerraba espacios y que seguía presionando alto.
El duelo acabó 2-1 tras tres minutos de tiempo añadido y los jugadores del Atalanta se quedaron durante varios minutos en el campo para celebrar junto a su afición, en un ambiente de máximo entusiasmo que los empujará hacia la gran cita del miércoles ante el Valencia.