El partido Arema FC vs. Persebaya Surabaya acabó con un triunfo 3-2 a favor de los visitantes; sin embargo, la fiesta del fútbol se vio manchada de sangre por los trágicos enfrentamientos entre los hinchas de los clubes al finalizar el encuentro.
Tras el compromiso por la Liga de Indonesia, los aficionados se pelearon y hasta se metieron en el campo de juego. Producto de esta barbarie, 127 personas murieron, incluidos niños, y se registraron 180 heridos, según el reporte policial local. Además, las fuerzas del orden también afirmaron que dos oficiales perdieron la vida.
Los agentes lanzaron gases lacrimógenos a los hinchas que entraron al campo de juego, pero también lo hicieron contra las gradas del Kanjuruhan Stadium, recinto en el que se desarrolló el cotejo deportivo.
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De acuerdo al medio Daily Star de Reino Unido, el gas no se dispersó, lo que provocó el desmayo de varios hinchas mientras intentaban escapar, algunos intentaron trepar las rejas para huir, mientras que otros cayeron y fallecieron al ser pisoteados por el tumulto.
Las medidas de la Liga Indonesia
“Estamos preocupados y lamentamos profundamente este incidente. Compartimos nuestras condolencias y esperamos que esta sea una lección valiosa para todos nosotros”, expresó Akhmad Hadian Lukita, presidente del torneo indonesio.
A raíz del trágico suceso, todos los partidos de la competencia local fueron suspendidos. Además, la Asociación de Fútbol de Indonesia informó que el Kanjuruhan Stadium no albergará más cotejos por el resto de la temporada.
Peresbaya lamenta las muertes en el estadio
Por medio de sus redes oficiales, el club publicó el siguiente mensaje: “La gran familia de Persebaya expresa su más sentido pésame por la pérdida de vidas tras el partido Arema FC vs. Persebaya. Ninguna vida vale fútbol”.