Los USB se han convertido en los dispositivos favoritos para almacenar archivos. Su fácil uso y bajo precio ha hecho que sea imprescindible en la vida de las personas. Así como puede ser el mejor aliado para la portabilidad de documentos, también podría ser el peor enemigo si no cuentas con la precaución necesaria.
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Desde que se lanzó el USB al mundo, este ha sido el reemplazo del popular disquete, que tenía la misma función, pero su capacidad de almacenamiento era menor. Con el pasar del tiempo, se ha lanzado una gran variedad de modelos, tamaños y tipos de este popular y pequeño dispositivo. Si creías que todos eran seguros, estás equivocado.
Se lo conoce como USB Killer. Resulta una seria amenaza para la seguridad de nuestros dispositivos. Para protegerte de uso, es importante que conoce de qué se trata y cómo funciona.
¿Qué es el USB Killer?
El USB Killer es un dispositivo diseñado para dañar y destruir dispositivos electrónicos. Su aspecto puede ser similar al de una unidad USB convencional, lo que lo hace aún más peligroso. Cuando se lo conecta a un puerto USB, el USB Killer genera una descarga de voltaje extremadamente alta en un corto período de tiempo.
USB Killer: ¿Cómo funciona?
El funcionamiento del USB Killer se basa en la manipulación de la electricidad. Esto quiere decir que cuando se conecta a un puerto USB, el dispositivo hace una carga de una gran cantidad de energía eléctrica. Luego, el USB Killer libera esa energía de vuelta al dispositivo conectado que va entre los 100 a 200 voltios.
Esta sobrecarga es capaz de causar daños irreversibles a los componentes internos del computador y llevándolo a su inutilización permanente. Es decir, los componentes como el disco duro, memoria RAM y hasta el sistema operativo quedaría totalmente destruidos.
Conectar un USB desconocido e infectado a una PC o laptop podría causar daños irreparables, por lo que es recomendable evitar usar cualquier USB que se encuentre en la calle. El resultado puede ser riesgoso.