La elección de Donald Trump como el próximo presidente de Estados Unidos, cayó mal entre varios deportistas y famosos de la unión americana, quienes han lamentado en múltiples ocasiones su triunfo en los pasados comicios de dicho país. Mike Evans, receptor de los Bucaneros de Tampa Bay, fue el último en unirse a las protestas.
El jugador permaneció sentado durante la entonación del himno en el juego donde su equipo enfrentó a los Osos de Chicago, en lo que parecía otro acto rechazo al racismo que inició el quarterback de San Francisco, Colin Kaepernick; sin embargo, el propio Mike aseguró al término del choque que su reclamo fue hacia el presidente electo, Donald Trump.
“Se trata de él, no del Partido Republicano o Demócrata. Es solamente por quién es y está bien documentado todo lo que ha hecho. No me voy a levantar (en el himno) por alguien en quien no creo”, señaló el jugador nacido en Texas.
Además lanzó una advertencia en la que afirmó que no volverá a entonar el cántico nacional hasta que el magante deje de ser el presidente de Estados Unidos.