La que se creía la lucha más predecible de NXT TakeOver: WarGames terminó siendo su mayor sorpresa. Andrade “Cien” Almas se convirtió en el primer mexicano en portar el Campeonato NXT, pero ese gran momento tuvo un costo, dejar a Drew McIntyre lesionado.
Aunque los ángulos de lesiones son usuales en la lucha libre – no hace falta si no ver todas las luchas entre Roode y Nakamura – parece ser que esta vez la presión ejercida por Almas sobre el brazo de McIntyre hizo más daño del esperado, dejando al escocés con un posible biceps desgarrado, que dependiendo de su gravedad podría requerir cirugía.
Después de que el encuentro terminara, el Universo NXT vio como el personal médico se acercó a atender a un frustrado McIntyre y cuando el encuentro hubo finalizado, Triple H dio una entrevista en la que le confirmó a Cathy Kelley que McIntyre deberá someterse a exámenes médicos para saber qué tan severo fue el daño.
Haciendo seguimiento a la información, Pro Wrestling Sheet pudo confirmar que se trata de una lesión legítima.
Por su parte, el canal oficial de WWE en YouTube publicó un video en el que el escocés da sus impresiones tras el encuentro, mostrando un ánimo decaído, como no podía ser de otra manera.
Ahora surgen las dudas sobre el futuro de McIntyre en NXT, pues si debe tomarse un tiempo fuera, no sería de sorprender que su regreso se diera directamente en las marcas principales, en las que años atrás fue Campeón Intercontinental y de Parejas.
Tampoco sobre recordar que McIntyre no fue el único lesionado de NXT TakeOver: WarGames, pues el alemán Alexander Wolfe sufrió un corte en la cabeza que provocó un profuso sangrado durante la intensa guerra que tuvo lugar en el encuentro estelar de la velada.