En el fútbol es muy difícil poder armar un equipo solo con mirar a los jugadores en sus respectivos partidos. Hay que determinar qué futbolistas aguantan la presión, y el entrenador saber qué es lo que quiere, qué busca con su planteamiento táctico o qué sistema usará para que los movimientos sean bien ejecutados tácticamente. Quedan pocos días para enfrentar a Argentina, en el inicio de las eliminatorias, y me parece que no se asumió con responsabilidad algo que debió solucionarse hace mucho, desde la ida de Hernán Darío Gómez (julio del 2019).
Después de fracasar con el Bolillo la Selección debió tener un técnico que trabaje y si no podía trabajar con los jugadores, hubo que buscar alternativas para ver qué cosa se podía hacer. Jordi Cruyff sabe lo que él quiere de los futbolistas que convocará, pero ellos no tienen claro qué pretende él.
¿Qué vamos a hacer ante esta situación que es tan poco profesional como declarar que ya tiene armado el once (para visitar a los argentinos)? Él sabe, porque los ha visto, que hay jugadores que pueden ir por dentro, ¿pero qué sucederá con la respuesta de esos futbolistas cuando se enfrenten a un sistema táctico diferente, que los haga cambiar de plan, si no tienen ubicada la disciplina táctica de Cruyff?
Los dos primeros partidos son contra rivales fuertes y al principio la dirigencia de la FEF va a respaldar a Cruyff, pero quién va a respaldar a Francisco Egas. La prensa, que en su gran mayoría está en desacuerdo con lo que está haciendo la Federación, va a hacer reproches si la Selección comienza mal y no sé cuánto se pueda sostener este proceso.
Sobre las actividades alternas de Cruyff (comentarista de la cadena SER, de España, para la que comentó el domingo anterior el clásico Real Madrid contra Barcelona; y desde ayer nuevo columnista del diario catalán Sport), en la época de Dusan Draskovic a veces entrenábamos con un solo futbolista, o con dos, cuando había problemas por los que no podían jugar; por ejemplo, los casos de Wilson Macías y Víctor Mendoza. Como DT de Ecuador Dusan demostró un profesionalismo único. Estaba enfocado el 100 % del tiempo a la Selección y se pudo cambiar la imagen del balompié nacional.
Estar distraído escribiendo para un periódico de otro país significa que Cruyff tendrá tiempo de sobra para otras cosas, cuando lo que debe hacer es concentrarse al 100 % en qué hacer por la Tricolor. Cruyff debe despertarse y pensar en la Selección, caminar por las calles pensando en la Selección y a la hora de comer también pensar en la Selección. Si su comportamiento es de otra forma, va a ser complicado. Ecuador no es un país que tenga una gran cantidad de futbolistas y es tiempo de ponerse a trabajar.
Cruyff debió convocar permanentemente a los jugadores que están en nuestro medio, conversar con ellos, estar en el país laborando. Cruyff tiene que corregir su manera de comportarse en nuestro país. Está jugando con la Selección de todos y este equipo merece la mayor preocupación posible. (O)