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El mundo del fútbol recuerda al mito e ídolo de muchos, Diego Armando Maradona, pues se cumplieron dos años de su partida y el vacío en notorio ante el contexto que vive el planeta, pues es el primer Mundial sin el 10. Sin embargo, ‘Pelusa’ dejó anécdotas imborrables, tal como cuando fue hincha de la Selección Colombia durante 90 minutos, esto, para el Mundial Rusia 2018.
Colombia jugó el Mundial Rusia 2018 luego de haber sorprendido al mundo nuevamente en 2014, su paso a la cita orbital en territorio europeo prometía, pues a pesar que, en fase de grupos cayó en su debut contra Japón, supo levantarse y derrotó a Polonia y Senegal, consiguiendo el pase agónico a octavos, bajo la dirección de José Néstor Pékerman.
Maradona cafetero
Para aquel entonces, ‘El Diego’ hacía parte del programa ‘De La Mano del 10′, el cual era transmitido en la cadena venezolana TeleSur, aquí, exponía su análisis sobre el Mundial y detallaba los puntos más importantes del torneo, además de claramente apoyar a la ‘Celeste’, cuadro con el que se coronó campeón del mundo en México 1986.
Pasada la fase de grupos, Colombia se instaló en octavos de final y enfrentaría a un temido rival, Inglaterra. Diego Maradona vivía la previa del encuentro junto a sus amigos que portaban la casaca amarilla, aunque él vestía un polo celeste con la bandera de la Argentina. Aquí vivía frente al televisor cada una de las incidencias del encuentro entre cafeteros y aquella selección que él derrotó en el 86.
Cada una de las polémicas jugadas eran comentadas por Maradona, en medio de gritos, gestos y protestas en contra de Mark Geiger, juez norteamericano que se encargó de dictar justicia en el Estadio Spartak de Moscú.
‘No señor, por favor, es foul de Kane. Kane lo engancha y se tira, pedí el VAR maestro’, fueron las palabras de Diego, tras la falta que señala el árbitro en contra de Harry Kane, quien tras un tiro de esquina forcejea con Carlos Sánchez y termina lanzándose al suelo, situación que fue considerada como penal y amarilla para el colombiano, dicha jugada terminó en gol para Inglaterra, que se llevaba parcialmente la victoria.
Cada jugada de gol que protagonizaba Colombia era halagada por Diego Maradona, quien se mostraba inconforme y veía a los ingleses como su mayor enemigo, mientras que evidenciaba un amor desconocido para la selección sudamericana.
El 10 colombiano
En la reposición del encuentro, Matheus Uribe intentó empatar el partido con un disparo desde fuera del área, sin embargo, Pickford, cancerbero inglés, lo mandó afuera y esta se convertía en una de las últimas jugadas del encuentro. Diego estaba emocionado, su notoria euforia era sentida por sus acompañantes, quienes veían expectantes el tiro de equina que se venía.
La pelota fue cobrada desde el córner, mientras que en área se vivía una cacería completa; desde atrás llegó el defensor Yerry Mina, quien saltó y la mandó al fondo de la red para colocar el 1-1 y obligar a los cobros desde el punto penal.
El campeón del mundo dejó brotar su emoción y colocó la voz en el cielo, gritando a todo pulmón la anotación de los colombianos:
“Ahí está, tiráte, tiráte, goooool, si señor, hagan tiempo ahora!”.
Con la medalla de su cadena en la mano, Diego vivió cada uno de los cobros de Colombia en los penales, los gritó como un colombiano más y mantuvo la fe intacta, pues cuando los cafeteros fallaban, lamentaba como si él estuviese dentro del campo, sin embargo, al final todo fue tristeza, pues Inglaterra venció y dejó a los de Pékerman, fuera del Mundial.
Diego le pide perdón a Colombia
Más adelante, Diego Maradona le pidió perdón a los colombianos y expuso su molestia en transmisión en vivo en De la Mano del 10, ante el papel del árbitro del partido, pues considero que habían sido injustos con Colombia, respecto al penal en contra de Kane.
“Yo le pido disculpas a todo el pueblo colombiano, pero los jugadores no tienen la culpa, acá hay un señor que ya, googleándolo, no se le puede poner a dirigir un partido de la magnitud y de las cosas que se jugaba el pueblo colombiano en estos octavos de final”, sostuvo el 10.
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