Por: Diego Morini
Una competencia que rompió el molde y que persigue un cambio sustancial. El Mundial de China es la cita en la que la Federación Internacional de Básquetbol ( FIBA) deposita todas sus expectativas para mejorar la difusión de la disciplina a nivel global. Desde el 31 del actual comenzará el show, pero para llegar hasta allí se movieron muchas piezas en busca de potenciarlo. Sedujeron a la NBA con un nuevo formato de competencia (las ventanas eliminatorias) con la promesa de que utilizarían menos a sus jugadores, pasaron de 24 selecciones participantes a 32, corrieron un año la realización del torneo para que los calendarios no lo pusieran a competir en procura de sponsors con la Copa del Mundo de fútbol y ordenaron la competencia para que la mayoría de las selecciones que participen en China pueda obtener su boleto para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Un menú fuerte.
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Es cierto que esta Copa del mundo, más allá de la presencia del Dream Team, contará con figuras de la talla de Giannis Antetokounmpo, el MVP de la NBA, que buscará la corona con Grecia y que Serbia apuesta al poder de jugadores como Nikola Jokic, el pivote que revolucionó a Denver Nuggets. Pero lo que realmente genera más atención es conocer cómo será el nuevo sistema de competencia y qué debe hacer cada equipo para, además, obtener una plaza para la cita olímpica en Japón. Este último punto es una carta importante de FIBA, porque buscó que los seleccionados lleven su mejor personal al Mundial y no se reserven para los Repechajes y así llegar a un Juego Olímpico.
Respecto del Mundial 2014, que tuvo a España como país anfitrión, ya no habrá 4 grupos de 6 equipos, sino que se conformaron 8 zonas de 4 equipos cada una y se disputarán desde el 31 del actual al 15 de septiembre. Los dos mejores de cada grupo (juegan todos contra todos) pasarán a la siguiente instancia, que también será en grupos. Allí habrá cuatro nuevos grupos y cada selección jugará dos nuevos partidos ante los rivales con los que no se haya medido en la etapa anterior. Además, se arrastrarán los tres resultados de la primera rueda a esta nueva zona. Por lo tanto, las posiciones se determinarán después de un total de 5 partidos. Los dos mejores de cada zona se clasificarán a lo que se denominó como la instancia campeonato, que comenzará en los cuartos de final y será de eliminación directa. La final se disputará el 15 de septiembre.
Ahora bien, cada uno de los participantes de esta Copa del Mundo toman nota con atención de cada detalle. Por ejemplo, Gregg Popovich, con el seleccionado de los Estados Unidos, está muy atento a cómo se desarrollará todo porque los Juegos Olímpicos encantan al universo NBA. Y la lupa que pone el DT de los Spurs en el Mundial obedece a que tiene un potencial diferente con el que contaba originalmente. Es que arrancó con una preselección con nombres como los de James Harden, Anthony Davis, CJ McCollum, Eric Gordon, Damian Lillard, Kyle Lowry y P.J. Tucker. Varias lesiones sacaron de la competencia a algunas de las estrellas y también algunas franquicias de la NBA jugaron sus cartas para torcer la voluntad de otros. Más allá de eso la lista definitiva presenta un grupo fuerte, aunque con menos cartel: Kemba Walker, Donovan Mitchell, Jayson Tatum, Kyle Kuzma, Harrison Barnes y Myles Turner.
Ante este escenario es que los Estados Unidos mira atento no solo el poder de Grecia y Serbia, sino que también a Francia que tiene talentos NBA como Rudy Gobert, Nicolas Batum o Evan Fournier. Todos quieren luchar por la Copa, pero también obtener la mejor ubicación posible en la competencia para volar a Tokio el año próximo, el plato más tentador detrás del título.
Sergio Hernández, el DT de la selección de la Argentina, con la Copa del Mundo de China 2019. (Foto: FIBA)
(Foto: captura)
Allí es donde entra en escena el seleccionado de la Argentina. El equipo de Sergio Hernández conoce su potencial y sabe que puede competir con la mayoría de los seleccionados. Pero hace cuentas. Los jugadores como Luis Scola, Facundo Campazzo y Nicolás Laprovittola repiten que su principal meta es conseguir un lugar en Tokio 2020. Ellos conocen también sus posibilidades y entienden que luchar por el título es una misión compleja, por eso apuntan especialmente a ser uno de los mejores equipos de América ubicado en el Mundial. ¿Por qué?
China 2019 será la primera instancia de clasificación para Tokio 2020. Serán 7 los seleccionados que sellarán su pasaje directo a los Juegos Olímpicos y eso se determinará así: obtendrán plazas los dos mejores ubicados de Europa, los dos de América y el mejor posicionado de África, Asia y Oceanía.
No termina allí la aventura rumbo a Japón, porque los 16 mejores clasificados del Mundial que no se clasifiquen directo a los Juegos, podrán obtener un lugar en Tokio en los torneos de Repechaje que definirán los últimos 4 de los 12 equipos para la cita olímpica. Japón, como anfitrión, ya tiene su lugar, pero después en los repechajes serán 24 las selecciones que dejarán la piel por un lugar (FIBA se reserva 8 invitaciones: dos para América, Europa, África y Asia). Se realizarán 4 torneos con 6 equipos por competencia y jugarán todos contra todos. El ganador de cada certamen se meterá en los Juegos.
Es cierto que la competencia perdió muchas figuras en el camino por diferentes situaciones y muchos equipos quedaron debilitados, pero también cuenta con otras como Marc Gasol y Ricky Rubio en España, Felicio en Brasil, Salah Mejri en Túnez, Joe Ingles en Australia, Cedi Osman en Turquía, Jonas Valaciunas en Lituania, Rui Hachimura en Japón, Al-Farouq Aminu de Nigeria, Nikola Vucevic en Montenegro.
En definitiva, la Copa del Mundo de China 2019, es el mundial de los cambios que busca la explosión final del mundo FIBA.