Las decisiones de Nuno Espírito Santo al no alinear de arranque a ninguno de sus jugadores mexicanos sorprendieron considerando que el Porto ya no juega competiciones europeas.
Tras el empate el fin de semana anterior contra el Benfica que mantuvo a un solo punto la diferencia entre los lisboetas y los dragones en la tabla general, la victoria en el Estadio Do Dragao ante el Os Belenenses cobraba vital importancia.
El mediocampista de contención Danilo Pereira se encargó de poner el 1-0 en una acción de táctica fija a los 36 minutos. Tras una pelota larga el argelino Yacine Brahimi le asistió y aquel de volea mandó su disparo hasta el fondo de la red.
Poco pasó en el partido hasta el minuto 70, cuando llegó el 2-0. Jesús Manuel Corona ya había hecho su ingreso al campo por André Soares y apenas 180 segundos le bastaron al mexicano para asistier a Tiquinho Soares. Eso se llama saltar fresco al césped y echar las cosas a andar con alegría y atrevimiento.
Otros 180 segundos después llegaría el 3-0 definitivo. Fue mediante un cobro de pena máxima canjeado por gol por Brahimi. Algunos instantes más tarde, con el partido ya cerrado, ingresó al campo Héctor Miguel Herrera por el español Óliver Torres. Layún veía las acciones con su bebé en el palco.
Con la victoria, el Porto momentáneamente supera al Benfica por dos unidades (67 puntos contra 65). Sin embargo, la escuadra de Raúl Alonso Jiménez deberá jugar mañana ante el Moreirense, antepenúltimo lugar de la clasificación general de la Primeira Liga.