El Barcelona sigue tratando de completar la plantilla con la que quiere hacer borrón y cuenta nueva tras una temporada en blanco en la que vio además como el Real Madrid se llevaba todos los títulos en juego. Para ellos está teniendo que sortear, un año más, las dificultades (NBA, China, Turquía, Rusia…) que presenta el actual mercado y que ya le ha hecho perder de vista objetivos como Gentile, Datome, Weems, Rice, Calathes, Shved…
El Barça, que no ha dejado de trabajar en la renovación de su plantilla a pesar del proceso electoral del club gracias a una ampliación de contrato de sólo un mes de Joan Creus, se movió rápido para formar una rotación interior completamente renovada y en la que ahora mismo hay seis integrantes y sólo dos jugadores de la pasada temporada. Todo lo que echó de menos en términos de músculo, defensa, rebote y juego por encima del aro lo ha tratado de compensar con Lawal, Samuels y Diagne, que podría irse cedido. A ellos se suma Vezenkov, una de las grandes promesas del baloncesto europeo y que hará de ala-pívot junto a Doellman, el único que sigue además del intocable Tomic. Se han ido Pleiss, Lampe, Nachbar y no ha regresado Todorovic, que jugará en el Khimki.
Por fuera, el puzzle está siendo más difícil pero empieza a tomar forma: según Eurohoops, el alero alto será Stratos Perperoglou, que dejará el Efes a pesar de tener otro año firmado en Turquía. Este movimiento dejará fuera de la ecuación a DeShaun Thomas y multiplica la opción de que no se firme un nuevo contrato a Huertas y se opte por un base estadounidense. El favorito es Malcolm Delaney. Perperoglou (30 años, 2,03) no recibirá en el Palau mucho menos de los 850.000 euros que cobró la pasada temporada en el Efes, al que llegó tras un triunfal periplo en Grecia. Allí se consolidó como uno de los aleros más competitivos de toda la Euroliga, una pieza importante en tres títulos de campéon de Europa: dos con Panathinaikos y uno con el Olympiacos.
Además, el Barcelona ha oficializado ante la ACB su oferta por Pau Ribas y ahora esperará el movimiento del Valencia, que tiene hasta el próximo jueves para igualarla y quedarse con el escolta español. Si en los próximos días el Valencia no iguala, Ribas jugará en un barça que ya le pretendió el pasado invierno ante la plaga de lesiones (Abrines, Navarro, Oleson) de su rotación exterior.