Raúl Jiménez sigue entrenándose en Madrid a la espera de que se cierre su cesión para jugar en el West Ham. El acuerdo entre clubes está alcanzado desde hace algunos días, pero en este momento existe un impedimento que se está tratando de solventar. Por su condición de extranjero en la Premier el futbolista mexicano debe cumplir unos requisitos para recibir el permiso de trabajo para enrolarse en el West Ham. En realidad la regla se resume en que el futbolista tiene que haber participado en el 75% de los partidos de su selección en los que haya estado en la categoría de elegible (no lesionado) durante los dos años anteriores a la petición del permiso. Desde el primer momento el West Ham se temía que Jiménez no cumpliría el requisito, pero el obstáculo, que desde hace tiempo ya es objeto de debate, puede ser salvado por un permiso especial de la Premier en condición de “Talento excepcional” como ha sucedido ya otras veces.
Ayer el West Ham supo que oficialmente Enner Valencia está fuera de los campos unos tres meses, mientras que Carrol, otro de los delanteros, no regresará hasta octubre. Bilic necesita efectivos arriba y mientras espera a Jiménez, el West Ham también ha avanzado sobre Bahebeck, del PSG, y está cerca de conseguir su cesión. Bilic necesita dos delanteros para reforzar su equipo y Raúl Jiménez quiere encontrar un destino en una liga de prestigio donde vaya a tener minutos. La normativa está obsoleta ya que, aún no cumpliéndose, en más de un 70% de los casos los clubes de la Premier acaban consiguiendo el permiso de forma excepcional (Gabriel o Coutinho son dos ejemplos). Raúl Jiménez no es el único. El Chelsea fichó hace unos días a Kenedy, un prometedor mediapunta de 19 años procedente del Fluminense, y pese a que el futbolista ya se entrena a las órdenes de Mourinho tampoco aún ha conseguido el permiso de trabajo.