El Rayo ganó su primera Copa del Rey de Juveniles al imponerse al Madrid 1-2 en Ceuta. Los de Merino salieron nerviosos al campo y sus errores propiciaron que el conjunto de Ramis fuese un ciclón. Mayoral avisó en el minuto 3 con un disparo que se fue alto. Le siguió otra ocasión de Lazo, un remate al larguero de Borja Sánchez y un buen chut de Febas que salvó Javi Ruiz. En ese aluvión de ocasiones, un contragolpe del Rayo fue cortado en falta y ahí se originó su primer gol. Shafa estrelló su lanzamiento en la barrera, pero el balón le volvió y centró. Nico Cañizares peinó en el área, Oliveros falló en la salida de puños y Uche marcó a placer. Le tocaba remontar al Madrid. Los de Ramis empataron a los seis minutos en un córner que sacó Lazo y Lienhart machacó de cabeza.
En la segunda parte, el Rayo leyó mejor el partido. Frenó el juego del Madrid taponando la creatividad de Febas con dos contra uno o con faltas. Tantas le hicieron que no pudo acabar el partido. El torrente de balones a Mayoral se acabó y el temor a perder se apoderó de ambos equipos. Ahí la fortuna le sonrió al débil. Lienhart despejó el balón en el área, pero Kike metió el pie y el rebote se convirtió en un remate perfecto.
Con el 1-2 el Madrid se volcó y todo acabó en locura. Mayoral perdió los nervios y terminó expulsado por golpear a Poblete sin balón, después de que este le hiciera una falta. Ganfornina sacó el libre directo y su centro al área acabó con Javi Ruiz fuera de su portería y Pablo Clavería parando el remate de Lazo con la mano. Fue una reacción genética. El padre del chico es Jesús Clavería, exportero milagro de la Selección española de fútbol sala. Ni por esas le perdonó el árbitro. Penalti y expulsión en el minuto 95. Sin Mayoral, Molina tomó la responsabilidad de chutar. Pero fue el momento de Javi Ruiz. Detuvo el penalti y se convirtió en el héroe de la primera Copa del Rey del Rayo.