El Imperio de los Incas desapareció en las arenas del tiempo hace casi 5 siglos y desde entonces no hubo intentos serios de restablecer el legado de esta gran civilización andina ¿o no es así? ¿Qué pensarías si te digo que un alemán se consideraba sucesor de Pachacutec y le declaró la guerra al Perú republicano? por loco que parezca este episodio poco conocido existió.
Karl Lamp, conocido luego como Carlos Lamp, fue un alemán que, por razones poco conocidas, no se sintió hijo de los caballeros teutones ni de los héroes de la mitología germana. Él escuchó el llamado del dios Wiracocha, por lo que se aventuró a cruzar mar y tierra hasta la tierra del Inti.
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El 'Inkarri' alemán
Arribó a tierras peruanas en 1867 y no pasó mucho para asentarse en el distrito cusqueño de Paucartambo, donde los locales, casi ni bien llegado, vieron en este personaje lo más cercano a una divinidad, por lo que al poco tiempo fue ungido como Viracocha.
Los ancianos compartieron su sabiduría milenaria, los hombres su fuerza de trabajo, mientras que muchas mujeres se enamoraron de él por su físico y su avasalladora personalidad; inclusive llegó a contraer matrimonio con una descendiente directa de una de las panacas incaicas.
No fueron pocos quienes vieron en Carlos Lamp la encarnación misma del Inkarri mito que, supuestamente, asegura que un salvador regresaría para restituir el Tahuantinsuyo, leyenda que el inmigrante alemán comenzó a tomársela muy en serio.
El 'Inca alemán' y la guerra contra el Perú
De hecho, tal fue su convencimiento que él era el redentor prometido que le declaró la guerra al Perú e, incluso, llegaron a apoderarse de los distritos de Quispicanchi y Calca. Bajo su mandato tenía a 20 mil personas.
Sin embargo, en 1883 su aventura acabó cuando fue interceptado y desterrado. Lamp dijo a sus hombres que volvería a Prusia (hoy Alemania) para negociar ayuda con Otto Von Bismarck el apoyo logístico ya que contaba con los hombres suficientes para retomar las armas e implantar el segundo Tahuantinsuyo.
Los ancianos le suplicaron que no viajara pues veían una calamidad en su futuro; sin embargo, Carlos no hizo caso y zarpó. No se tuvo noticias de él en años.
Carlos Lamp y las teorías sobre su muerte
Las teorías sobre su muerte son muchas. Lo cierto es que llegó a Prusia, pero se desconoce si murió de vuelta al Perú o si fue asesinado por agentes del Estado o, la más difundida, que pereció a consecuencia de una enfermedad de transmisión sexual.
Unas de las más afiebradas asegura que llevó el “oro de los incas”. Lo cierto es que dejó una importante descendencia en Cusco y Paucartambo quienes, quizás, tengan una versión de primera mano sobre la extraña desaparición de su antepasado.