De mala manera, sonrojado, superado en apenas dos minutos del inicio de la segunda parte y desperdiciando una ventaja de dos goles, el Bayern Munich encajó un duro revés ante un recién ascendido, el Heidenheim, para sufrir su sexta derrota de la temporada y dimitir, definitivamente, de la puja por la Bundesliga que caerá a manos del Bayer Leverkusen. El conjunto de Thomas Tuchel se queda sin argumentos. Cayó de mala manera frente al benjamín del campeonato alemán y entregará la corona a los pupilos de Xabi Alonso.
La segunda derrota seguida del Bayern fue impensable. Apuntaba a una reacción, herido en su orgullo y con el compromiso ante el Arsenal de la Champions League el martes. Esa sensación dio en la primera parte cuando de la mano de Serge Gnabry alcanzó el intermedio con una ventaja de 0-2. El primero fue en el 38, cuando Harry Kane aprovechó un pase de Gnabry para romper la igualdad. El segundo fue en el 45. Un pase desde la izquierda de Alphonso Davies lo cabeceó a la red Gnabry.