Existe un rey de los debuts, y ese se llama Erling Haaland. En 2017, con tan solo 16 años, el delantero anotó en su estreno copero con la camiseta del Molde. Dos meses después hizo lo mismo en su estreno en primera división. La tendencia continuó en el Red Bull Salzburgo: el noruego marcó, en setiembre del 2019, un triplete en su debut en Champions League.
¿Y con el Borussia Dortmund? Igual. Ingresó al campo de juego cuando su equipo iba perdiendo 3-1 en manos del Augsburgo por Bundesliga y, en apenas 23 minutos, convirtió en tres oportunidades para ganar 5-3. Con el Manchester City no podía ser de otra manera.
PUEDES VER: ¡Terrible blooper! Miguel Simón soltó un ‘gallazo’ en vivo cuando relataba gol de Haaland
Ayer, en su debut en Premier League con el cuadro ‘Cityzen’, el atacante —cuyo padre actuó en el mismo club a inicios de este siglo— anotó en dos ocasiones (36′ de penal y 65′ tras un pase excepcional de Kevin de Bruyne) para darle la victoria por 2-0 al equipo de Pep Guardiola en su visita al West Ham.
Haaland se ha consolidado como el delantero titular del City por encima del argentino Julián Álvarez, quien también fichó por el equipo de Guardiola en el último mercado de transferencias. Foto: EFE
Los goles de Erling Haaland no solo significaron los tres puntos para el City, sino que también transformaron al ‘9′ noruego en el segundo jugador en toda la historia del Manchester City en concretar un doblete en su estreno liguero, por detrás del argentino Sergio Agüero contra Swansea City en agosto del 2011.
Luego del triunfo, Haaland aprovechó los micrófonos para mandarle una advertencia al resto de los equipos. Para él, el nivel que mostró ayer el City irá creciendo con el pasar de las jornadas. “Todo dependerá de las conexiones que hagamos en los entrenamientos. Seguiremos mejorando”, señaló el goleador. ¡Tiembla la Premier!
PUEDES VER: Conoce a Patrick Askengten Siu, el ‘Haaland peruano’ que la rompe en Noruega
La palabra
Pep Guardiola, técnico del Manchester City
“Tuve la suerte de dirigir a Lionel Messi. Si anotaba un gol, quería dos. Si anotaba dos goles, quería tres. Los grandes delanteros nunca están satisfechos”.