Talía Azcárate es una de las figuras predominantes en el crecimiento del fútbol femenino en el Perú. Fue futbolista (integró la selección femenina Sub 20 con 14 años) y sabe el sufrimiento que vivían las mujeres al elegir el balón. Por eso se dedicó a promover la inclusión y el desarrollo del deporte. En esta entrevista, Talía comparte su visión sobre la importancia de iniciativas como las que impulsa El Comercio e Igma Sports con el Semillero Repsol Fútbol Femenino, así como su experiencia personal en un deporte que ha transformado vidas. Desde la participación de jóvenes talentosas hasta la necesidad de un mayor apoyo institucional, Talía nos ofrece una perspectiva valiosa sobre el futuro del fútbol femenino en nuestro país.
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—Importante la iniciativa que tenemos como El Comercio de promover la inclusión y masificar el fútbol femenino
Es fundamental. Estoy bastante contenta que sea descentralizado. Ver a las chicas de Tingo María, que viajan, juegan y vuelven a viajar con todo lo que eso significa. Y ganaron sus partidos. Honestamente, me hubiera gustado tener esa oportunidad cuando yo era sub 13. Yo comencé en equipos de hombres y, bueno, luego las cosas se fueron dando y creo que el crecimiento del fútbol femenino tiene una tendencia exponencial y hay que apoyar a las niñas. Veo una cantidad de papás acá, gritando por las chicas, alentando. Me parece fundamental y eso tiene que replicarse todos los años. El fútbol formativo es clave para que luego tengamos resultados importantes en la selección.
—Entonces, ¿dirías que deberían venir scouts para ver posible talento?
Estoy segura de que mucho de estas chicas van a llegar a la profesional y hay que aprovecharlo. Hay que hacer un llamado respectivo a la Federación y venga a ver el torneo organizado por Repsol, El Comercio e Igma Sports. Muy contenta por esta oportunidad de estar aquí.
—¿Qué se te viene a la mente al ver a las niñas?
A la Talía niña, sin duda. En mi época era muy complicado. Además, tenía casi una connotación negativa, mis papás no lo entendían. Mi papá siempre jugó fútbol y mi mamá me preguntaba: “¿por qué fútbol? ¿Por qué no otro deporte?”. Yo siempre estaba convencida de que el deporte no tenía género, nosotros tenemos que hacer el deporte que nos gusté y que estemos preparadas para hacer. Hoy lo más importante es que se diviertan. En esta categoría vas viendo chicas que resaltan mucho y lo que significa el deporte como apoyo de cambio social es gigante. Me proyecto a la Talía de 10 o 12 años y lo feliz que hubiese sido disputar este torneo es increíble.
—¿Cómo analizas el trabajó de Emily Lima a cargo de la selección femenina?
Yo he entrevistado a Emily en diferentes oportunidades y creo que tiene ideas muy claras sobre lo que se tiene que hacer. Los resultados no son inmediatos, hay que creer en los procesos y dejar que transcurran. Las cosas no se dan de manera inmediata y creo que como sudamericanos somos naturalmente impacientes, y así no funciona el fútbol formativo. Emily me decía: “Mi principal objetivo es acortar distancia para luego comenzar a competir”. Yo veo a Colombia, converso mucho en un programa que se llama “Marca Femenina” por Direct TV que hablamos del deporte en general siguiendo a la mujer y me enlazó con los diferentes países. Colombia es un ejemplo claro para la región, ya que marca una pauta muy interesante desde el tema físico.
—Con respecto a Jorge Fossati, ¿Cómo analiza lo que viene ante Chile y Argentina?
Honestamente, con 6 cupos y medio, las chances son más altas, pero si fuera cuatro y medio como el último proceso, ya estaríamos fuera, es una realidad. Hay que ganarle a Chile, pero tenemos que ir partido a partido, aunque suene a cliché. Ganar todos nuestros partidos de local y luego robar de visita, sino, no se va a lograr. Es curioso el 15 de noviembre va a ser el partido ante Chile con Gareca y esa fecha, hace unos años, nos hizo ir al Mundial tras 36 años de ausencia. Es una fecha que espero que no se manche y sea positiva. Va a ser, además, raro, duro, muy difícil ver a Gareca en el banco de Chile en el Nacional, en un partido decisivo para ambas selecciones.
—¿Cómo analizas el retorno de Guerrero?
Yo entrevisté a Paolo hace unas semanas y manifestaba que al no ver hecho una pretemporada desde el 2020, él siente que físicamente está muy lejos de lo que él necesita. Por eso, tuvo una conversación con Fossati y no ha estado en esta última fecha doble e iremos viendo como se siente él y creo que Paolo va a sumar. Todo él que sumé será bueno, porque tenemos un universo de jugadores tan cortos que no nos permite prescindir tan rápido. El agradecimiento con Paolo Guerrero será eterno.
—Hace un mes conversé con Jacinto Espinoza y comentaba que hay que ser muy malos para de 10 selecciones no clasificar al Mundial con los seis cupos y medio, ¿tú piensas lo mismo?
Es duro, la verdad es una sentencia dura lo que marca. En los dos procesos anteriores hemos quedado quinto. Ahora, con seis y medio son casi siete, que clasifican al Mundial, vamos a pelear como siempre. El detalle es que ha sido un arranque muy complejo, pero hay que apoyar a la selección siempre, de ese barco no nos podemos bajar jamás.
—¿Por qué a Perú le cuesta el recambio generacional?
Es difícil ¿no? Digamos figuras de la dimensión de Jefferson Farfán o Paolo Guerrero, sobre todo el puesto de ‘9′, ha sido muy difícil de suplir. Chemo está haciendo un muy buen trabajo, pero hubo años desiertos que no hubo Torneo Reserva, eso va en desmedro de lo que pretendemos. Hay que ir buscando nuevos talentos. Apareció Luis Ramos y fue llamado por Fossati y tiene ofertas de Rusia y Ecuador. Ojalá siga apareciendo nuevos elementos. Mira a Valera, quien no tiene proceso formativo, jugó fútbol playa y pasa un momento importante con Universitario. Hay que buscar nuevos jugadores que sumen a la selección.
—¿Jorge Fossati debe seguir al mando de la selección peruana?
Yo creo en los procesos. Es como Rusia 2018, al término de la primera ronda, todos querían sacar a Gareca. Hay que tener paciencia, sé que es difícil tenerlo con el resultado adverso, pero el 3-5-2 ha sido un sistema que ha tomado un tiempo a los jugadores adaptarse a la idea. El triunfo ante Uruguay era una necesidad para seguir vivos, pero si creo que Fossati debe seguir con este proceso, pero de no ganarle a Chile estaríamos entrando a una situación complicada, por eso hay que ganarle como sea.
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