Solo un programa. Se cuestiona mucho acerca del presente y futuro del equipo Puebla. ¿Cuál es el rumbo? ¿Qué se pretende? ¿Quién tiene los hilos y hacia dónde los mueve? Muchos preguntas y solo una respuesta, por cruel que sea, no deja de ser una realidad y ante ella, todos los aficionados tenemos que aceptarla.
Se acaban de cumplir en este año 76 años de la fundación del equipo. ¿Quién con esa cantidad de años no ha tenido altas y bajas?
De esos 76; yo les puedo platicar de 55 sin ningún problema. Estadio Ignacio Zaragoza, palco 103. Tendría nueve o 10 sillas y cada 15 días en la liga de ascenso, llamada en esos tiempos, Segunda División, siempre estaba lleno, ese y los de junto, que no serían más de 20. Recuerdo a los Ablanedo, Los Posada, Los Dura.
Los fines de semana que nos tocaba visitar, el estadio de Orizaba, La Piedad, Salamanca, Naucalpan, eran visitas obligadas.
En el año 62, mi papá con una pequeña participación, forma parte de la directiva y después de 3 o 4 años, era normal que al terminar el juego en el Zaragoza, después de una derrota, el sin más comentario que ir a pegarle al árbitro en turno, se bajara las escaleras y solo amedrentara sobre el campo al señor de negro.
También recuerdo un partido amistoso contra el Botafogo de Brasil, un día entre semana, con estadio a reventar y en cual el Puebla perdió 2-5 contra el equipo Brasileño que parecía que venía de otro mundo; espectaculares, técnicos, dinámicos, en una palabra, totalmente diferentes a lo que veíamos cada fin de semana.
Muchos domingos, terminando el juego que empezaba a las 12 del día, como la tradición lo dictaba, te salías del estadio y solo atravesabas el pequeño vestíbulo que existe entre la entrada principal y los accesos que te llevaban a los palcos de futbol a la derecha, o a los palcos de béisbol que se ubicaban a la izquierda. Entonces la gente del campo preparaba inmediatamente lo necesario para el juego de Beis en el cual los Pericos de Musulungo, Rony Camacho, Jorge Fitch, Murillo, Garibay, jugarían su partido en doble cartelera, unos a las 12 y otros a las 3:30; el primero de futbol y el segundo de beis.
Terminando el juego, el regreso obligado era caminando toda la 2 norte hasta los portales, vuelta a la derecha y tomar la Reforma hasta atravesar el paseo Bravo y tomar la 9 poniente y llegar al 1319 en donde era mi casa.
También recuerdo, volviendo al futbol, un cuadrangular q hubo en el estadio de Ciudad Universitaria, en la Ciudad de México, para tomar, el ganador, un lugar en la primera división. Puebla había inaugurado estadio para la olimpiada del 68 y me imagino q el hecho de tener un majestuoso estadio, le valió la invitación a dicho cuadrangular.
Cuando se inaugura el estadio, el Puebla jugó vs el América él preliminar el cual perdió, no recuerdo si 6 o 7 cero. La diferencia entre una categoría y la otra, era abismal. El estadio se inaugura en el 67, previo a los Juegos Olímpicos q fueron en el 68 y el cuadrangular tuvo q ser en el 69.
Participaban el nacional, Naucalpan, Puebla y un cuarto q no recuerdo. El Puebla consigue el ascenso venciendo al Naucalpan. Para lo q es ascender hoy en día y deportivamente hablando, ( no había cambios de sedes, ni compra de franquicias, ni descensos ganados en cancha y ganados con dinero en federación ), fue hasta cierto modo fácil; ganabas tu primer juego y te enfrentabas al ganador del otro partido. Ganando dos juegos tenías derecho a jugar en primera división. Y llega otra historia, otra captación de recursos, otros gastos, otros intereses. Aparecen los administradores, los representantes y por supuesto, los vividores.
De los 70’s hasta nuestros días, no recuerdo propietarios no poblanos en el equipo, salvo el tiempo q estuvo el Sr Suarez a finales de los 70’s, pero con gente como Benito Pardo, Manolo Lapuente y Leonel Urbina como administradores y técnicos del equipo. También recuerdo al Sr Abed, dueño de una cadena hotelera y ganador de concursos de construcción en la ciudad, sacándose la rifa del tigre: “quieres construir, pues administras el equipo”. Eso fue el trato para que le entrara a la administración, recordando el cambio del color de la franja, de azul a anaranjado, por ser el color representante de su cadena. También lo recuerdo con una anécdota en la cual se le cobraba una cantidad por “tacos” de los futbolistas y que ascendía a varios miles de pesos. Su respuesta fue q era mucho para una comida; ni idea tenía en que negocio estaba. Se logró desde el ascenso establecer el equipo y del estadio, ni se diga: dos veces mundialista, el el 70 y en el 86, más la olimpiada el 68 y q me imagino, dio pie a que el equipo fuera invitado al cuadrangular para su ascenso.
Leonardo Ortiz, C.P Rafa Moreno Valle, Emilio Maurer, Paco Bernat, la famosa Chiquillada ( Edy Abraham, Tito Olvera, el mismo Maurer, entre otros ), que lograron el ascenso en el 96, Ricardo Henaine, Carlos López Chargoy. Siempre dinero poblano y siempre el equipo estuvo del lado del gobierno. Siempre actuó como aliado o brazo deportivo del movimiento político en cuestión.
Para bien o para mal, todos los sexenios tenían q ver con el equipo, siempre recordando que el futbol da votos y los votos dan puestos políticos importantes. Por muchas vías, dineros gubernamentales, dieron solvencia económica en todos estos años al equipo. Hubo quien los utilizó bien y hubo quien solo se benefició en lo personal .El punto no es hacer un juicio de quien sí y quien no, solo quiero hacer historia de la forma que está equipo a subsistido durante muchos años. De 32 identidades federales, hay por lo menos 18 que darían lo que sea, hablo de recursos, para tener uno de los 18 lugares q hay en primera división. En la Ciudad de México hay 3, en Guadalajara 2, en Monterrey 2, en Tijuana 1, en Coahuila 1, en Querétaro 1, en el Estado de México 1, en Aguascalientes 1, en Guanajuato 1, en Michoacán 1, en San Luis 1, en Puebla 1, en Hidalgo 1 y en Chihuahua 1. Solo 14 entidades tienen futbol de primera, en un país de 32 estados y una capital y de más de 2 millones de klm. 70 millones de aficionados, que tienen en su mayoría a este deporte como su única diversión. Entonces, la razón, q los gobiernos aporten dinero por múltiples vías para sostener el espectáculo y después, cobrarse con votos, tiene mucha razón de ser. A mí me tocó vivirla cuando me toco ser técnico del equipo sobre los años 2006 al 2010. La narrativa de los hechos, caería más en lo morboso, que no es mi intención ni mi idea. Solo aclarar que así ha sido.
En los últimos dos años, la administración para poder salvar la franquicia en pleno mercado de piernas efectuado en Cancún, TV Azteca rescata al equipo porque así convenía a sus intereses. La operación o convenio q se hizo entre la televisora y el Sr Lopez Chargoy no me lo sé, solo podría suponer q en su momento a los dos les fue bien, o siendo pesimista, les fue menos mal. El dueño no tenía dinero para sostener el equipo y la televisora necesita el evento q produce el equipo de futbol para su afamado “Viernes Botanero”, que sale en pantalla todos los viernes de 7-9 y de 9-11 con muy buena audiencia; empieza el fin de semana y la gente sale a bares y restaurantes, teniendo la televisora al consumidor bien determinado a celebrar y ver dos juegos. Es una pena, pero el equipo PUEBLA FC, se convirtió en un espectáculo de entretenimiento para la televisión, en un programa con un presupuesto como cualquier programa q produzca la televisora. Sería peor q por no tener un dueño con capital poblano, el equipo tuviera q desaparecer, pero a mi entender no es lo más sano, los más limpio y lo que se merece por sus 76 años el equipo.
Para todo esto, la televisora aparece al Sr Manuel Jiménez, me consta q es un empresario prominente y que él junto con sus hermanos vienen de muy abajo y se forjaron un capital importante en el comercio. Que quizá al cabo del tiempo, no sé, 2 o 3 años, el Sr Jimenez se haga del paquete de acciones, pero otra vez regresará el problema que tuvo el Sr Bernat y el Sr Lopez Chargoy: capital y liquidez suficiente para mantener una actividad que por muy poco, se tiene q facturar en ventas sobre 250 millones al año, esto para mantener un equipo chico y que dentro de ese dinero, aparte de lo poco q se paga de derechos de TV, más publicidad, más taquilla, se tiene q vender jugadores, comprados baratos y después vendidos a los grandes compradores a precios altos. Entonces el Sr Jimenez tendría q venderlo al mejor postor, recuperar su capital y su trabajo y otras manos y quizá, otro lugar dará entrada al equipo.
El segundo camino, es producir tus jugadores, con un proceso de formación de no menos de 5 años y formar una cadena de la cual puedas vender año con año. Aquí valdría la pena mencionar q el Puebla FC, con actividad deportiva y necesidad de campos de futbol, para uso de sus equipos y producción de jugadores, puede ser el único equipo en el mundo de primera división, del país que quieran pensar, que en 76 años no ha tenido en propiedad ni un solo metro cuadrado; parece chiste, pero la realidad es así, un equipo de primera que no tiene un solo metro.
Después de lo anterior y viendo los tiempos q se viven y las reglas y necesidad para competir en el mercado global del futbol, el equipo no puede depender se ser solo un programa unitario para televisión. El equipo representa a un estado muy importante en país, quizá sea el 4* o el 5* en importancia. La desgracia, que viene junto a la verdad, es que en todo el estado no hay una empresa con los tamaños para hacerse del equipo, empresa de capital Poblano, y si la hubiese, dudo q pondrían algún dinero para sostener el equipo.
No dudo q en un futuro próximo, el equipo sea llevado a otro estado, alguno de los 18 estados q no tienen equipo en primera división y que con el apoyo de su gobierno, se hagan de la franquicia. Los tiempos románticos de este negocio, pasaron hace 10 años y las bases para enfrentar esta empresa no existen. El Puebla vive para la televisión y su destino lo manejan seres humanos, con conocimientos o sin ellos, pero q nada tienen q ver con lo q somos en Puebla y los Poblanos.
El final del Morelia fue lo que a mi parecer, está condenada esta franquicia del Puebla. El gobierno de Michoacán y el de Puebla no se deja presionar por la televisora, pero uno de las 14 entidades q no tenía fútbol en la liga MX, no tardó en poner en la mesa muchos millones, esperando que el nuevo Gobernador también le guste el fútbol para q la televisora esté tranquila otros 6 años. Los hechos así lo dicen y si desaparecieron al Morelia con toda una infraestructura en sus fuerzas básicas, con el Puebla no se tocaran el corazón.