Hace unos años los nombres de Marcelo Flores, Silvana Flores y Tatiana Flores irrumpieron con fuerza en la agenda de los medios deportivos mexicanos, poco a poco la noticia de que un chico de 16 años despuntaba a base de talento en la academia del Arsenal, uno de los mejores clubes de Europa y que sus hermanas construían su historia con el Chelsea Femenil.
Los ojos de los directivos en México se iluminaron, porque los tres eran talentos potenciales, lo mejor es que tenían el pasaporte mexicano y eran materia de selección. Las gestiones que en su momento realizó la Federación Mexicana de Futbol permitieron que los tres se decantaran por jugar con la Selección Mexicana, porque los tres tenían la posibilidad de jugar con México, Canadá o Inglaterra.
La decisión de los hermanos Flores fue bien recibida, a Marcelo se le llamó para integrar concentraciones de selecciones menores con Canadá e Inglaterra, pero se descantó por México, tuvo procesos en los equipos inferiores, incluso en el 2021 llegó a debutar con la Selección mayor en un partido amistoso contra Chile.
Su talento es innegable, porque se formó en una de las mejores academias de Europa, pero el paso al primer equipo nunca lo dio, faltó algo para integrarse de lleno con los Gunners, quienes lo cedieron al Oviedo de la Segunda División España, se pensaba que ahí podría dar el salto de madurez, terminar con esa formación y saltar al máximo teatro, pero no fue así.
El Arsenal negoció con Tigres su fichaje de la élite en Europa y ser un talento que tenía pinta de brillar en la élite, acabó en la Liga MX, a la que llegó para tener un papel secundario. Desde su llegada pudo haber jugado 16 partidos en el Apertura 2023, solo tuvo actividad en 10 (8 de fase regular y 2 de Liguilla), solo en uno fue titular. De los 1,440 minutos que pudo haber jugado, solo participó 198, es decir el 13.75 por ciento de actividad, y le marcó un gol a Chivas en la Jornada 14. Su regreso a México ha sido una anécdota y queda la imagen de lo que pudo ser y no será.
Del Chelsea a Rayadas
Una situación similar pasó con Silvana Flores, la mayor de los hermanos que se formó en el Arsenal y luego pasó al Chelsea Femenil, de los mejores clubes de Europa en la categoría, pero tampoco dio el salto grande, de las Blues emigró al Reading y luego al Tottenham, donde tampoco logró la consolidación. Entonces apareció Rayadas de Monterrey y la fichó en 2022.
Silvana ya había tenido su proceso en selecciones menores, fue subcampeona del mundo Sub 17. Después integró la Selección Sub 20 y previo al Mundial de Costa Rica en 2022 hubo una polémica al interior del equipo nacional, acusaciones anónimas hacia la entrenadora Maribel Domínguez y su cuerpo técnico; dichas acusaciones de conductas inapropiadas le costaron el puesto a la entrenadora, con el tiempo se le atribuyeron a Silvana Flores. Y después Maribel reconoció que hubo una fuerte presión para que Silvana fuera incluida en la Selección Sub 20, pero ella no estaba convencida de su nivel y la jugadora se quedó sin Mundial.
En Rayadas apenas y tuvo actividad, ese nivel que se presuponía traía de Europa no fue diferencial en el campo. Se fue cedida a Mazatlán el Apertura 2023, ahí tampoco pesó, por lo que regresó a Rayadas para este torneo y de 6 partidos que se han jugado no ha visto actividad ni un solo minuto. No, ese talento que veía en Europa se difuminó en ella también.
Del Chelsea a Tigres
Y apenas hace un par de semanas (23 de enero) Tigres Femenil anunció el fichaje de Tatiana Flores, la delantera que se formó en el Chelsea, que (al igual que sus hermanos) tuvo su proceso en selecciones menores, pero que tampoco logró trascender y no se mantuvo para dar el paso y brillar en la Women's Super League de Inglaterra.
De Chelsea pasó al Real Oviedo de España, igual que Marcelo, pero tampoco trascendió ahí, al final de la última campaña se quedó sin equipo, se habló de una posibilidad para fichar con el Atlético de Madrid, pero no se concretó nada. Y acabó, al igual que sus hermanos en la Liga MX, por ahora no ha debutado con las Amazonas y habrá que ver cómo pinta su futuro.
Los hermanos Flores llamaron la atención, sus nombres deslumbraron, cautivaron, e ilusionaron, pero de la gran historia que su entorno presumió que podían construir en la élite europea, acabaron en la Liga MX y no porque sean malas competencias, pero ha quedado claro que a los tres les quedó grande el Viejo Continente.
FCM