La imagen se hizo viral en redes sociales: un inmenso estadio Cuauhtémoc lució semivacío en el juego de la Jornada 9 entre Puebla y Pachuca. Y sí, por cada uno de los 7 mil 676 aficionados que estuvieron presentes hubo en proporción hasta seis asientos vacíos. Y no solo ha pasado en la Angelópolis, también en Ciudad Juárez, Mazatlán, Torreón, Pachuca, Querétaro y la Ciudad de México, plazas donde en algunos partidos no se superó la barrera de los 10 mil asistentes.
Así ha sido la constante en este Apertura 2024, que justo a la mitad de la temporada va camino a convertirse en el torneo con la asistencia más baja desde que se levantaron las restricciones de la pandemia del covid-19. En total, en los 83 juegos que se han disputado hasta la fecha, han asistido un millón 581 mil 281 aficionados a los 17 estadios de la Primera División, para un promedio de 19 mil 52 seguidores por partido.
Solo para darnos una idea de la caída, el semestre pasado en la fase regular del Clausura 2024 se promediaron 23 mil 314 personas por juego, más de cuatro mil aficionados en cada partido. Un año antes, en el Clausura 2023 también hubo un buen promedio con 23 mil 173 aficionados. Eso sí, siempre las asistencia han bajado en los torneos que culminan en diciembre, pues en 2022 apenas ingresaron 19 mil 960 seguidores por juego y en el Apertura 2023 fueron 20 mil 651.
Luz y sombra
Mientras Tigres y Monterrey se mantienen como los equipos con las mejores entradas, ocupando más del 80 por ciento de la capacidad de sus estadios (Rayados con un promedio de 41 mil 840 y los felinos con 40 mil 966), hay otros que vienen en caída libre de manera inesperada.
Los casos más concretos son Puebla y América. Por ejemplo, el torneo pasado La Franja tuvo un promedio de 17 mil 473 personas que asistieron al Cuauhtémoc en cada partido. Hoy, esa cifra se ha reducido a la mitad, pues apenas contabiliza 8 mil 667; incluso, es el equipo que peor porcentaje tiene de acuerdo al aforo de su estadio, al apenas ocupar el 18 por ciento de los asientos disponibles.
Para las Águilas, la caída es más alarmante pues luego de años de alternar entre el segundo y tercer mejor equipo con asistencias, ahora que tuvo que dejar el Estadio Azteca, su gente decidió no seguirlo al de la Ciudad de los Deportes. De un promedio de 42 mil 162 asistentes, ahora pasó a 14 mil 563, una disminución de casi 28 mil personas. Sí, aunque el aforo del Azteca es mucho mayor al de la Ciudad de los Deportes, con la inercia que llevaba, tendría estadio lleno cada 15 días, algo que no ha sucedido.
Ni por la TV
Además de las bajas entradas en los estadios, la audiencia para los partidos de la Liga Mx tampoco es alta. De entrada, de los 83 partidos disputados hasta el momento, solo 31 han pasado por la televisión abierta, los demás se fueron a los canales de paga o los servicios de streaming.
De acuerdo con HR Media, empresa dedicada a las mediciones de las audiencias en México, apenas 10 partidos han logrado superar los 5 puntos en el rating (bajo una metodología donde un punto corresponde a 201,119 hogares que sintonizaron el juego), de los cuales el Clásico Nacional alcanzó un 10.8, cifra aceptable que queda lejos, por ejemplo, de los 14 puntos que tuvo la Final del torneo pasado entre América y Cruz Azul, que se replicó tanto en el Canal 2 de Televisa como el 7 de TV Azteca. En cuanto a los partidos por TV de paga, el Juárez contra América llegó a 2.3 por Fox Sports.
RGS