En los últimos dos años ha existido una constante para Pumas cada vez que visita a Tigres: allá no se gana. Desde el 2015 y hasta hoy, Universidad se ha medido a los dirigidos por Ricardo Ferretti en cuatro ocasiones, llevándose a cuestas tres derrotas, una por goleada, dos resultados adversos, a la postre, eliminación del torneo en disputa. Es, sin duda, el escenario que más les cuesta para lograr un marcador favorable y ahora, vuelven con la encomienda de conseguir lo que hasta ahora no han podido, y sí, de nuevo en una instancia de matar o morir, pero esta vez en la Concachampions.
Pumas viajó a Monterrey con su mejor plantel disponible, pensando en seguir avanzando en el torneo de la Concacaf, encarando la ida de los cuartos de fi nal con seriedad y el compromiso, como lo dijo Paco Palencia, de trascender en los dos torneos (incluida la Liga): "No es sencillo enfrentar dos torneos a la vez, pero queremos pelear por ambos, salir adelante de lo que implica visitar a Tigres; tuvimos poco tiempo de preparación, pero esa no es razón para pensar que no saldrán las cosas como deseamos", dijo el entrenador.
El ambiente en el Universitario, la forma de juego de Tigres y hasta los fantasmas recientes se han hecho presentes para Pumas. En su más reciente visita, ya con Palencia en el banquillo, en la vuelta de los cuartos de final del torneo anterior, Tuca y sus dirigidos les propinaron la mayor goleada de la gestión de Paco: 5-0 para concretar la eliminación de los auriazules en Monterrey. Fue una noche fría, con intensa lluvia y el futbol de un solo lado. Universidad cayó de la peor manera, sin reacción de por medio.
Antes, también en Liguilla, pero en el Apertura 2015, en la ida de la Final, Tigres venció a los pupilos de Guillermo Vázquez con un doloroso 3-0, que aunque se alcanzó a igualar el marcador en Ciudad Universitaria, al final, desde los once pasos los del norte inclinaron la balanza a su favor: 4-2. En duelos de definición, a Pumas no se le da enfrentar a los regiomontanos, pero hoy tratará de romper esta clase de maldición, aunque sea en Concachampions.
En lo que respecta a la fase regular de Liga, Pumas ha visitado en el Clausura 2016 y 2015 el estadio Universitario, igualmente sin resultados positivos.
Primero sumó un empate sin goles en el cierre de la era de Memo Vázquez, hace casi un año, en un torneo que se combinó con la Copa Libertadores y el torneo local.
El resultado no sirvió de mucho, pues al final de cuentas se quedaron sin la posibilidad matemática de entrar a la Liguilla, misma situación, pero resultado diferente en 2015, cuando se llevaron un nuevo descalabro, esa ocasión de 3-0.
PENDIENTE
A partir de la edición del 2008- 09, la Liga de Campeones de la Concacaf cambió su formato, situación que ha arrojado a campeones mexicanos, aunque desde entonces, Pumas apenas ha aparecido un par de veces en las semifinales. Palencia, como jugador, vivió con Cruz Azul, en el curso 2009-10, el quedar fuera de pelear en el título en el partido decisivo.
Años después, en la edición del 2011-12, ya con Memo Vázquez en el banquillo, fue Monterrey el que los dejó fuera de disputar la Final; hoy esperan comenzar a fraguar una historia similar, pero con un desenlace distinto. Antes, tendrán que medirse a uno de sus peores escenarios, al que más vulnerables les convierte y al que menos les conviene; como mal añadido, que Tigres recurre a titulares.
Compra aquí tus boletos para la Liga MX