Por Kenyi Peña Andrade:
Alejandro Ishikawa tiene la precisión de un samurái con su katana al momento de derrumbar los 10 pinos con la bola. Sus ojos pueden dar la impresión de que nació lejos de acá, pero es tan peruano que ni para entrenar se quita el buzo de la selección nacional. Alejandro es uno de nuestros mejores representantes en bowling, un deporte que aún no es reconocido como tal en nuestro país, pero eso no lo amilana, sino que lo ha envalentonado para hacerlo crecer y que se hable tanto de él como de fútbol o vóley. En mayo participó en el Iberoamericano que se disputó en Madrid, de donde se trajo una medalla de plata, y ahora apunta a representarnos en los próximos Juegos Panamericanos Lima 2019.
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— No es tan común que un joven practique bowling en el Perú...
Practiqué varios deportes, incluso béisbol y pertenecí a la selección cuando fui más chico. El bowling es un deporte distinto al resto, porque aquí no importa el talento, solo el trabajo y dedicación que muestres en el día a día.
— ¿A qué te refieres cuando dices que en el bowling no importa el talento?
Es todo cuestión de trabajo. Se necesita mucha paciencia y repetición. Un día puedes tener una gran jornada y al día siguiente fallar todo. Hay que mostrar mucha constancia y disciplina para mostrar un nivel regular.
— Me contaste que al principio no te creían que el bowling era una disciplina...
Me pasó mucho cuando recién empecé. Nadie me creía que había una federación de bowling, pensaban que les tomaba el pelo.
— ¿Cómo empezaste a practicarlo?
Mi mejor amigo me preguntó si quería practicar y me animé solo por curiosidad. Faltaban pocos meses para un campeonato nacional y entré porque faltaba uno en el equipo. Solo tenía 4 meses y terminé en el último puesto en aquella ocasión.
— Pero no tiraste la toalla…
Creo que siempre fui competitivo y quise mi revancha. Regresé y quedé dentro de los 15 mejores entre 65 participantes. Luego, al tercer año, clasifiqué para la selección Sub 16.
— ¿Qué se necesita para ser un buen jugador de bowling?
Debes estar bien preparado físicamente, pero también en lo mental, porque te desgastas mucho en la repetición. Todo se basa en la precisión.
— ¿Cuáles son las reglas?
Es muy sencillo, el objetivo es derribar la mayor cantidad de pinos que haya. Una línea son 10 lanzamientos y normalmente se juega a 6 líneas. El que hace más puntos gana.
— ¿Qué sensación tienes cuando derribas los 10 pinos?
Derribar todos los pinos es como hacer un gol en el fútbol. No se puede expresar en palabras, es una emoción muy grande y satisfactoria la que sientes. Solo cuando logras hacerlo puedes entenderlo.
— Noté que cada jugador usa su propia bola.
Podrías utilizar otras bolas, pero normalmente están personalizadas. Los huecos están hechos a la medida de los dedos de quien va a lanzar. Las bolas pesan 7 kilos, pero depende mucho de quién la cargue. Los niños suelen usar menos pesadas.
— ¿De qué se trata el proyecto que se está haciendo con los niños?
La idea es ir forjando canteras. Por eso la federación de bowling se está centrando en invitar a los niños a practicar bowling. Existía un miedo porque luego de mi generación no había muchos chicos para considerarlos como sucesores, pero con este plan no queda duda de que habrá futuro.
— Cuéntame sobre tus logros.
Empecé a los 13 años a competir profesionalmente. Este año conseguí medalla de plata en un Iberoamericano en Madrid. En el 2014 quedé segundo en la modalidad dobles y tercero en individual en un Sudamericano de Chile. En el 2015 quedé segundo puesto en un Sudamericano en Aruba.
— ¿Quiénes son las potencias en este deporte?
Estados Unidos, Puerto Rico, Canadá y Colombia. Nos estamos acercando a ellos de a pocos, hace unos años no ganábamos medallas y ahora la realidad es distinta. En un tema de capacidad, no tenemos nada que envidiarlos y en infraestructura ya nos equiparamos.
— ¿Cómo es tu entrenamiento?
Descanso solo los domingos, luego le doy mi tiempo completamente al bowling. Mucho sacrificio, pero lo vale. Veo poco a mis amigos porque prefiero estar entrenando.
— Se vienen los Juegos Panamericanos Lima 2019…
Primero quiero clasificar, porque solo competirán dos en bowling por nuestro país, luego hay que defender nuestra casa como sea. Todos mis compañeros de otros deportes nos estamos preparando para dejar el nombre del país en alto.
— ¿Qué piensan tus padres sobre esto?
Me apoyan siempre y para todo. Es muy importante sentir su respaldo. Me inculcaron a nunca dejar las cosas a la mitad y que todo se puede con buena organización.
— Formas parte del Top Perú Lima 2019...
Es una alegría increíble estar con los mejores de cada disciplina. No todos los países reconocen de esa manera a sus atletas y fue muy gratificante. Representar al Perú es un orgullo y siempre trato de hacerlo con la mayor responsabilidad del caso.
— ¿Qué le dirías a la gente que no se anima a practicar bowling?
Les diría que no necesariamente deben practicarlo para competir oficialmente, sino para pasar un buen rato con los amigos o la familia en sus ratos libres. Les aseguro que cuando empiezas a jugarlo ya no lo vas a dejar.
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