El amargo empate ante Melgar complicó las opciones de Alianza Lima, que está obligado a ganar todo lo que le queda y a soñar con un traspié de Universitario para lograr el título del Clausura.
La primera 'final' será este martes (8:30 p.m.) ante Binacional en el Guillermo Briceño Rosamedina, un estadio que le trae malos recuerdos al club victoriano y donde nunca ha ganado desde el ascenso del Poderoso del Sur a Primera División.
Mención aparte merecen los 3824 metros sobre el nivel del mar de Juliaca y la propia necesidad de Binacional, que necesita hacerse fuerte de local para soñar con la permanencia en la Liga 1.
El equipo de Aristóteles Ramos precisa ganar los dos partidos en casa que le quedan para salvarse del descenso, lo malo es que recibirá a Alianza Lima y Melgar, dos equipos que pelean por el título del Clausura.
Si bien está prácticamente clasificado a una hipotética final nacional, el equipo de Mauricio Larriera aspira a ganar el Clausura y para ello es imprescindible que pueda romper su mala racha en Juliaca.
Además, Alianza precisa mejorar colectivamente y futbolísticamente, y no depender tanto de la jerarquía de Hernán Barcos, aquel que ha venido solucionando partidos a partir de sus goles y asistencias.
El partido ante Binacional será una nueva prueba para Alianza Lima y el propio Mauricio Larriera, que saben que aparte del Clausura, el gran objetivo será conseguir el tricampeonato nacional.