El mercado de fichajes en Alianza Lima está en marcha. Tras asegurar la continuidad del arquero boliviano Guillermo Vizcarra, el club blanquiazul intensifica sus esfuerzos por cerrar al organizador, al ‘cerebro’ que tanto ansía para la temporada 2025. Con Néstor Gorosito al mando, los íntimos buscan cubrir las posiciones clave que el técnico argentino considera indispensables: dos extremos, un pivote y un volante ofensivo. Sin embargo, hasta la fecha, las negociaciones no han alcanzado un cierre que ilusione al estratega ni a la exigente hinchada aliancista, quienes esperan nombres que refuercen un plantel diseñado para pelear en todos los frentes.
El deseo del ‘Pipo’ Gorosito por encontrar al volante creativo ideal ha puesto sobre la mesa nombres importantes, aunque con ciertas dificultades. Edwin Cardona y Rubén Botta aparecieron inicialmente como opciones interesantes, pero sus cotizaciones elevadas y compromisos contractuales con Atlético Nacional y Talleres, respectivamente, complicaron cualquier acercamiento.
Por ahora, la opción más concreta parece ser la de Brahian Alemán. El experimentado volante uruguayo, de 35 años, milita en la Universidad de Concepción de Chile y ha ganado peso en las negociaciones para ser el nuevo eje creativo de Alianza Lima. Alemán podría aportar la experiencia que necesita el cuadro blanquiazul para liderar el mediocampo.
La lesión de Hernán Barcos: un golpe inesperado
No todo son buenas noticias en La Victoria. Hernán Barcos sufrió un contratiempo físico en los primeros días de la pretemporada. El ‘Pirata’ presentó molestias lumbares que le impidieron entrenar con normalidad tanto el domingo como el lunes. El delantero ya está siendo tratado por el cuerpo médico del club, con la esperanza de reincorporarse pronto a los entrenamientos grupales.
Es importante recordar que Barcos se perdió la recta final del Torneo Clausura por una lesión, y aunque ha dejado claro su deseo de superar los problemas físicos, este inicio accidentado genera preocupación. Con 40 años, el ‘Pirata’ sigue siendo una pieza fundamental en el ataque aliancista, pero su estado físico será un factor clave para su rendimiento en 2025.