Tras casi dos décadas en el béisbol, el avión de Orlando Román ya está a punto de aterrizar. El veterano lanzador va camino a disputar su octava Serie del Caribe, pero aún sueña por hacer varias paradas más.
“Seguir ahí representando a Puerto Rico y a la liga es otro logro más en mi vida”, expresó Román a EL VOCERO antes de partir rumbo hacia Jalisco, México, con los campeones defensores Criollos de Caguas.
“Pero yo tengo una meta personal que es jugar 20 temporadas. Esta es mi número 19 y espero tener salud para ver si el año que viene juego otra vez y tengo la dicha de ser campeón para participar en otra Serie del Caribe que sería más que bienvenida”, añadió.
Román, quien, además, ha sido integrante del equipo de Puerto Rico en los cuatro Clásicos Mundiales de Béisbol que se han disputado desde 2006, solo ha podido ganar un cetro caribeño en 2017, con los Criollos, y un subcampeonato en 2014, con los Indios de Mayagüez.
Pero el vegabajeño de 39 años trabaja todos los días para vencer el factor tiempo y cumplir con su objetivo.
“Yo me siento bien. Algunas veces uno se siente bien cansado por la edad. Pero me he mantenido trabajando y estoy satisfecho con la condición física mía. Estoy trabajando fuerte todos los días para mantenerme en mi meta personal”, aseguró el diestro serpentinero, quien está designado para lanzar el quinto juego del Clásico caribeño en caso que Caguas avance hasta la ronda semifinal.
Esta temporada, Román tuvo marca de 0-2 y efectividad de 5.50 en cuatro aperturas con los Criollos en el torneo invernal de la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente (Lbprc).
Previo a ello, había jugado con el club Chinatrust Brothers en la Liga de Taiwán, donde tuvo una ERA de 4.46. Allí dejó también una buena impresión y regresará nuevamente este año.
“Después de eso termino mis 20 años como profesional fuera de Puerto Rico y me concentraré para la liga de invierno y ya, básicamente, se acabó lo que se daba”, sostuvo al señalar que está “preparado mentalmente” para decir adiós. “El avión mío ya está aterrizando. Las temporadas largas se me están haciendo bien difíciles, pero seguimos trabajando para cumplir con mi meta final”, afirmó.
Sin embargo, cuando llegue ese momento, Román solo le dirá al béisbol ‘hasta luego’ ya que tiene sobre la mesa varias ofertas para asumir otra faceta en su carrera. Bien ya sea como coach de lanzadores en Taiwán o escucha internacional en Japón.
“Seguiría estando en el mundo del béisbol no como pelotero, pero bregando en lo que me gusta”, concluyó.